Recién llegada al lugar

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Al escuchar su respuesta lo unico que hizo es dar un paso hacia atras.

- Si me molesta o no, es mi problema.

Volvió a mirarla a los ojos con un rostro serio que muy se caracterizaba en él.

-Ahora .. ¿Podrías ya soltarme? Yo vine a ayudar y no a que me estes observando así.

Refiriendose a sus manos, las miró, también las de ella, se veían muy delicadas y suaves .. Se sentía algo acosado en esa situación.

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El paso atrás hizo que ella diera uno hacia adelante. Siempre hacía lo que se proponía, sin pensar en lo que pudiese acarrear eso.
- Si me molesta o no, es mi problema.
-[color=#009aff] También es el mío - el tono de voz de Azuiza, en ese momento, fue un poco cortante.
Él volvió a mirar a la chica a los ojos, totalmente serio. Aquello no le importó demasiado a Azuiza, puesto que esperaba que estuviera serio o cualquier cosa así. Le sería extraño que se sonrojase totalmente.
- Ahora .. ¿Podrías ya soltarme? Yo vine a ayudar y no a que me estes observando así.
- Oh, ahora mismo te diría algo como... "oblígame a soltarte". Pero, la verdad... no hay ganas. Así que... - antes de terminar la frase, le dio un beso en la mejilla a Ciel -... te soltaré.
Soltó sus manos y se apartó de él, alejándose unos pocos pasos. Volvió a coger la maleta que le había asignado momentos antes. Volvió a tener su expresión alegre de siempre, la que parecía que a ella todo le iba y le salía bien.
- Menos mal que no eres un chico normal, sino quizás me hubieras besado ya - comentó en voz alta.

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Ella se volvió a acercar y contestó cortante. Eso le pareció algo raro. No creía que alguien que tenía una sonrisa por mucho tiempo podría hacer algo así(?).

- Hmm

Dijo en tono de fastidió por lo que le había dicho, lo bueno fué entonces que lo soltó, luego de esto ella besó su mejilla. Él no le dió la más minima importancia. Observó lo que ella hizo que fue agarrar la maleta así que tambien hice lo mismo.

Notó alo raro .. De un momento a otro cambió de espresión. Ya tenía de nuevo una sonrisa en el rostro. Cuando escuchó lo que dijo ..

- Besarte .. Há .. No veo nada normal a eso, besar a una chica que invade tu espacio como si nada .. No lo creo.

Dijo en un tono muy despacio. Casi diciendolo para él mismo. Tomó las maletas y comenzó a caminar.

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- Hmm
Tono de fastidio... dudaba que una persona que fuera tan inexpresiva como lo había sido Ciel, expresase eso: fastidio, molestia. No le dio importancia al beso en la mejilla, como esperaba Azuiza. Quizás estaba empezando a acostumbrarse, levemente, a la no-reacción de Ciel ante aquellas cosas.
- Besarte .. Há .. No veo nada normal a eso, besar a una chica que invade tu espacio como si nada .. No lo creo - dijo en un tono despacio.
- Creeme, es algo normal - lo miró, con una sonrisa de oreja a oreja -. Seguro que lo dices porque no eres capaz de darme un beso.
Se puso a andar a su lado, hasta la barra de recepción. Azuiza ya no esperaba nada de Ciel, en tan poco tiempo había decidido no esperar nada de él de ahora en adelante. Era extraño, siempre tardaba mucho tiempo en decidir esto. Pero, en fin, siempre hay una excepción.

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- No caeré en tus 'retos', no lo hago y no lo haría porque NO quiero.

Expresó sus razones, no le gustaba mucho quedarse cayado, o más bien le gustaba estar en contra de las personas o algo parecido. Puso las maletas cerca de la recepción. Ya habían llegado. Se quedó callado para que esta chica preguntara el número de su habitación y ya terminara con la 'ayuda'. Sólo tenía una cosa en mente. Todas las demás personas son raras.

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- No caeré en tus 'retos', no lo hago y no lo haría porque NO quiero.
- No lo decía porque fuera un reto, lo decía porque es verdad. No eres capaz de hacerlo, aparte de porque no quieras - bostezó.
Llegaron a la recepción y él puso las maletas allí cerca. Después, se quedó callado. Seguramente el comentario de Azuiza le habría molestado, aunque fuera un poco, pero a ella le daba exactamente igual. Miró a todos lados, pero no vio a nadie en la recepción.
- Estoo... no hay nadie - volteó la mirada hacia Ciel.

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- Hmm

Murmuré..

Despues de eso me quedé callado, no tenía nada que decir, suponía .. Estaba serio y se me salieron dos palabras de la boca al ver una silla que había.

- Y? .. Entonces? ..

Me senté en una silla que había al lado para esperar que alguien se apareciera y nos diera el número de Habitación que necesitabamos. Al parecer ese favor se hacía de más y más tiempo.

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- ¿Qué haré? ¿Qué haré? - Dijo para sí misma, en un tono un poco preocupado, pero no tardó en desaparecer esa leve preocupación puesto que siempre aparecía una idea (dispartada, evidentemente) por aquella mente tan descolocada.
Se giró hacia Ciel, que se había callado y sentado en una silla que había por allí. Seguramente... sería para esperar a qué hacer o a esperar a que apareciese alguien de recepción, además, parecía bastante serio; por lo menos dijo algo:
- Y? .. Entonces? ..
- Pues... - se acercó, poniéndose de rodillas al lado de la silla y mirando desde abajo (obviamente) a Ciel -, si no aparece nadie o duermo en la calle o duermo contigo - propuso, totalmente seria.
Podría ser o no una broma, puesto que tenía una mente tan extraña, pero por ahora parecía no ser una broma. Quizás solamente estaba seria para aparentar que no lo era pero nunca es bueno pensar una cosa en concreto con esta chica porque siempre puede ser la otra que no pensaste.

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Ella se habia puesto junto de mi, al parecer ya tenía contestación a lo que yo le había dicho.
¿Dormir en la calle? ¿Conmigo?
La verdad las dos opciones eran malas, pero era menos mala (?) era que durmiera en mi habitación.

- O, ¿Regresamos a mi plan de preguntar por las puertas?

Me gire y acerqué a ella, quedando a la altura de sus ojos, aun estando sentado en la silla. Sus ojos también tenían un tono azul, y se reflejaba la luz del día en ellos. Moví la cabeza como negando lo que veía o algo y alejé un poco de ella.

- No no .. O se estaba negando algo él mismo, o estaba tratando de convenserse, no se sabía.

Aclaré la garganta y continué .. Ese plan es estúpido. Giré la cabeza evitando verla, pero la miré de reojo.

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- O, ¿Regresamos a mi plan de preguntar por las puertas?
- No quiero meterme en líos - bostezó la chica.
Ciel se giró y se acercó a ella, hasta quedarse a la altura de los ojos azules de Azuiza pero aún seguía sentado en la silla. Azuiza le miró, un poco perpleja, no esperaba que hiciese aquel gesto pero le gustaba volver a ver de cerca unos ojos azules como los suyos, eran bonitos. Se quedó confundida cuando él movió la cabeza y se alejó de nuevo.
- No no - se aclaró la garganta - .. Ese plan es estúpido.
- ¿Qué plan es estúpido? ¿El de dormir contigo, dormir en la calle o ir de puerta en puerta como unos vulgares ladrones? - Se sentó en el suelo, apoyando la espalda en la silla -. La verdad, lo más normal que veo es que duerma contigo peeero eso es cosa tuya, querido Ciel - se estiró y volvió a bostezar, esperando su respuesta.

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- Hablaba del mio. Pero ya que lo recalcas, también el tuyo es estúpido .. Ha! .. En la calle .. Ni que fueras vaga.

Me recosté en la silla y me deje caer un poco, algo aburrido.

- Y por tus bostesos, puedo apostar que ya quieres dormir.

Suspiré un poco y me volví a sentar de manera correcta, puse una mano en la cabeza de ella y revolví su cabello.

- Cosa tuya .. Yo .. Me levanté y agaché en frente de ella .. No tengo sueño como alguien .. Con un dedo toqué la frente de aquella chica y la empujé levemente.

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- Hablaba del mio. Pero ya que lo recalcas, también el tuyo es estúpido .. Ha! .. En la calle .. Ni que fueras vaga.
- Quizás tengo cualidades para serlo. Me haría amiga de los gatos callejeros... y me alimentaría de los cubos de basura - pensó en voz alta como solía hacer, casi estaba explicando lo que iba a pasar si ella acababa durmiendo en la calle.
Ciel se recostó en la silla, una pose algo incómoda a veces, pero Azuiza no se dio cuenta de que él había hecho aquello. Se dio cuenta de que los bostezos de Azuiza eran por sueño:
- Y por tus bostesos, puedo apostar que ya quieres dormir.
- ¿Y si no es sueño y es aburrimiento? - Le hizo saber la otra opción que había para dar explicación a aquellos bostezos que se le escapaban de la boca.
Escuchó que Ciel había suspirado, no entendía por qué lo hizo pero tampoco le dio más importancia de la necesaria. Le puso una mano en la cabeza y le revolvió el cabello, Azuiza se sorprendió ante aquel gesto de "cariño" (a ella solo le hacían eso por este motivo).
- Cosa tuya .. Yo .. - se levantó y se puso enfrente de Azuiza -.. No tengo sueño como alguien .. - tocó la frente de la chica con un dedo y la empujó con suavidad.
- ¿Hay algún problema porque tenga sueño? Antes de venir he estado haciendo cosas, como la maleta, por lo que es normal que esté cansada - le explicó, finalmente.
Esto podría sonar borde si no fuera por su cara feliz, su sonrisa y su tono totalmente alegre de siempre.; reprimió un nuevo bostezo que iba a salir a la luz. Fijó sus ojos en el chico y decidió preguntarle algo que se le había pasado por la mente:
- ¿Y estos gestos? Me parecen raros por como estabas siendo antes - iba a terminar la frase, pero algo más se le vino a la mente -. ¿No te estarás encariñando conmigo?

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Lo que ella comentó le dio mucha gracia y rió un poco.

-Eres una chica muy extraña ¿Te habían dicho?

Entonces se levantó

- Aburrimiento .. Claro! .. Mi presencia es aburrida.

Miró a otro lado evitandola, él sabía que no era un chico normal y que podría sonar algo antipático. Pero era su forma de ser.

- Vez si tienes sueño. Estas cansada .. ¿Gestos, qué gestos?

Él no se había dado cuenta de cómo se estaba comportando, pero ella tenía algo de razon .. Aunque no estaba seguro ¿Encariñar? No tenía registrado eso en su vocabulario de vida.

- ¿Encariñandome, contigo? Acostumbrandome

Tal vez era porque ella prácticamente era con la primera persona que estaba actuando algo de manera abierta. Su primera 'Amiga' Aunque .. Ese significado, también desconocía ..

- ¿Entonces dormirás?

Trató de evitar el tema, una pregunta que ni el se podía responder.

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Le extrañó que Ciel se riese aunque, para ella, su risa esa agradable y ella también se rió. Estaba siendo un momento algo cómodo, por como se comportaba ahora Ciel... dejando de ser tan "serio" como había sido al principio.
- Eres una chica muy extraña ¿Te habían dicho?
- Sí, me lo han dicho pero soy extraña en el buen sentido de la palabra... si es que tiene - dudó.
El chico se levantó, Azuiza le miró desde abajo y decidió levantarse. El trasero se le iba a quedar cuadrado y frío de sentarse en el suelo, no creo que eso fuera agradable... tener un trasero cuadrado debía ser extraño e incómdo.
- Aburrimiento .. Claro! .. Mi presencia es aburrida - volteó la mirada a otro lado, como si la evitara.
- No eres aburrido, para nada. Tienes un encanto especial, ¿sabes?
Se sacudió el trasero y miró por encima de su hombro, intentando verlo. Después, volvió a fijar sus expresivos ojos en el chico que tenía allí delante.
- Vez si tienes sueño. Estas cansada .. ¿Gestos, qué gestos? - Con aquello último, parecía estar algo confundido... sin entender realmente a lo que se referia la chica.
- Estos gestos tan agradables... me dan ganas de achucharte como si fueras un peluche - sonrió, aunque parecía más pícaramente que felizmente.
- ¿Encariñandome, contigo? Acostumbrandome.
Azuiza, al escuchar aquella última palabra, no pudo evitar reírse casi a carcajadas. No lo hacía a mal, ni para que el chico se sintiera así: mal. Si no, porque de verda le había hecho gracia aquello. Si a él no le había sentado aquella expresión de una forma totalmente buena, pediría perdón... pero para prevenir, fue lo primero que hizo:
- Perdón... perdón por la risa - fue calmándose, poco a poco, y secándose las pequeñas lágrimas que se le escaparon de aquella risa -, pero es que raramente te vas a poder acostumbrar a como soy con solamente el primer día de conocerme.
Giró la cabeza hacia la recepción, por si había aparecido el encargado de allí pero no hubo demasiada suerte. Suspiró, tendría que pensar algo ya para poder dormir... estaba bastante cansada y no duraría "cuerda" mucho tiempo.
- ¿Entonces dormirás?
- Dormir... si pudiera, lo haría. Recuerda: no tengo donde dormir - contestó a su pregunta, un poco seria y con su vista fija en cualquier detalle de la recepción. Fue un cambio de humor un poco brusco, pero casi siempre le pasaban cosas así, por su personalidad extraña.

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Se quedó un poco confundido por la risa que ella había expresado.

- Huh? ..

No le dió mucha importancia a lo que dijo entonces.

- Hablaba de dormir en mi habitación.

También se acercó a la recepción para ver qué había ahí.

- Disculpeeeeen, aqui hay una chica extraña en el buen sentido dela palabra, si es que la tiene, que no sabe cual es el numero de su habitación

Dijo serio pero en tono de burla. Esa 'ayuda' era la más larga de toda su vida, de una de las muy pocas que ha dado.

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- Hablaba de dormir en mi habitación.
- Si no es mucha molestia para ti, dormiré encantada - volvió a mirarle y sonréir como hacía unos pocos segundos.
Ciel también se acercó a la recepción, le tenía al lado de nuevo. Volvió a fijar la vista por aquel sitio, pero no pudo evitar mirarle de reojo. Una sonrisa y una pequeña risa se le escapó con lo siguiente que dijo su nuevo amigo, si podía llamarle así:
- Disculpeeeeen, aqui hay una chica extraña en el buen sentido dela palabra, si es que la tiene, que no sabe cual es el numero de su habitación.
El tono era serio, pero se notaba la burla en él. Azuiza subió bastante la cabeza y cerró los ojos, como si fuera un gesto de decepción. Una frase y una escena se le pasaron por la cabeza en aquel momento, de entre muchas eligió hacer esa.
- ¿Ya te quieres librar de mí? - Su tono era decepcionado, escondiendo realmente la broma que era.

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Al parecer ella tomó mal eso. Pero si yo sólo estaba jugando Pensé.
- No, no lo dije por eso, además ya te he ofrecido mi habitación.
Dijé algo preocupado, al parecer si me había pasado (?). O es que estaba tramando ella algo. De todas formas lo mejor para ese momento era disculparse .. Lo que más le costaba trabajo.
- Vamos vamos, estaba jugando. Una gota enorme recorrió su cabeza.
Se volteó y rápidamente fue por las maletas.

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- No, no lo dije por eso, además ya te he ofrecido mi habitación.
Parecía preocupado y Azuiza se dio cuenta, con sus disculpas tan precipitadas. Pensó en lo que iba a decir, sin cambiar su expresión, y antes de que nada concreto llegase a su mente o de que pudiese hablar, Ciel dijo algo:
- Vamos vamos, estaba jugando.
Miró de reojo a Ciel, sonriendo pícaramente, antes de que éste se volteara y fuera a por las maletas. Abrió los dos ojos y se giró para observarle, sin quitar aquella sonrisa pícara de su rostro. Se cruzó de brazos y se acercó a él, andando lentamente.
- Tranquilo, Ciel, que sé que estabas jugando - se acercó por su espalda y le abrazó con suavidad por detrás.
Le encantaba hacer aquel gesto, ese era uno de los abrazos que más le agradaban a ella y no le costaba nada hacer aquello a esa persona. Esperaba que aquello no le molestase, pero tampoco le preocupaba demasiado que lo hiciera. El abrazo no duró demasiado y lo deshizo casi a los dos minutos de habérselo dado. Después, cogió una de las maletas totalmente alegre.

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- Ah .. E-esta bien.

No hizo nada con respecto al abrazo y cargó las maletas dirigiendose al elevador.

- Vienes? Niña durmiente?

Todavía dudaba de cuándo esa chica estaba bromeando, asi que tenía que tener cuidado(?)

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- Ah .. E-esta bien.
Azuiza hinchó sus mofletes y miró como enfadada a Ciel, puesto que no había hecho nada ante aquel abrazo que ella le había dado. Seguramente le había molestado que no reaccionase de ninguna forma... o no (?).
- Vienes? Niña durmiente?
Asintió, solamente, seguía aún con los mofletes hinchados y su mirada de "aparente odio". Muchas cosas se pasaban por su mente, algunas eran solamente quejas otras eran... incoherencias. Estaba apunto de decirle algo a Ciel, sin pensarlo, pero decidió mejor pensarlo puesto que podía meter la pata y acabar durmiendo bajo un puente junto a un monton de gatos callejeros y suciedad.
- Eres un aburrido - comentó, al final fue sin pensarlo -. Y no soy una niña durmiente - sacó la lengua y volvió a hinchar los mofletes. Tenía un enfado de niña pequeña.

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- Eso es justo lo que acababa de decir y tu me negaste .. Ahora estas contradiciendote

Su rostro era demasiado gracioso en ese momento, pero se aguantó como pudo la risa. Ya estando en el elevador, puso el número de piso en que se encontraba su habitación.

- Niña durmiente y berrinchuda.

Dijo muy despacio, para que ella no lo oyera.

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- Eso es justo lo que acababa de decir y tu me negaste .. Ahora estas contradiciendote
- Pero yo lo digo porque no has hecho nada ante el abrazo que te he dado, ¡eres un hombre de piedra! Contigo no hay quien se divierta y se lo pase bien. ¡Aburrido! - Dijo todo esto muy rápido, por culpa del berrinche que llevaba encima y porque estaba diciéndolo todo conforme llegaba a su mente.
Azuiza había cogido su maleta fuertemente, andaron hasta el ascensor y subieron. Ciel puso el número del piso al que tenían que ir, en el que se encontraba su habitación. La chica miraba al suelo, con los mofletes un poco deshinchados, pero aún se notaba enfadada.
- Niña durmiente y berrinchuda - lo dijo lentamente, pero ella lo escuchó igualmente. Tenía el oído muy desarrollado para escuchar lo que decían de ella (?).
Fijó su mirada en él, ya estaba totalmente enfadada después de aquello que dijo. Sus mofletes estaban deshinchados por completo, parecía uno de sus típicos cabreos momentáneos... había tenido un cambio de humor bastante raro: de un enfado tonto de niña pequeña que no era ni verdadero a uno que si lo era, aunque momentáneo.
- Tendrás que hacer algo para disculparte - su tono era totalmente serio, parecía ser otra persona en aquellos momentos.

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- Pues qué más esperabas que yo dijera, después que me dijiste aburrido y de piedra. Tengo que defenderme ¿No crees?

Dijo en el mismo tono que ella, él tenía más experiencia (?) que ella en esas expresiones. El ascensor comenzó a subir y había un aura muy tensa por parte de ambos. Una niña molesta y un chico de Piedra.

Alaró la garganta.

- ¿Qué querías que yo haga respecto al abrazo que me diste? ¿Que te lo devuelva? ¿Un agradecimiento?

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- Pues qué más esperabas que yo dijera, después que me dijiste aburrido y de piedra. Tengo que defenderme ¿No crees?
Respondió aquello con el mismo tono que tenía Azuiza. El ascensor comenzó a subir hasta el piso indicado y había un ambiente algo desagradable allí, muy tenso. Este "cabreo" momentáneo de la niña, podría ser uno a bastante largo plazo pero no sería demasiado recomendable, ya que iba a tener que pasar la noche en la habitación de aquel chico, de Ciel, y no sería muy agradable la estancia si estaban así.
- ¿Qué querías que yo haga respecto al abrazo que me diste? ¿Que te lo devuelva? ¿Un agradecimiento?
- Pues sí, podrías haber hecho eso. O quizás podrías haber sonreído, o algo. Pero no quedarte sin hacer nada, como si no tuvieras sentimientos. ¡Eres inhumano! - Giró la cabeza hacia otro lado, mirando una de las paredes del ascensor.

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- No sé muy bien, pero los abrazos se dan porque se quieren dar, no por 'responder' alguno que te hallan dado, o porque otro quiera que lo abraces. Los abrazos si no nacen de tí no valen.

Siguió con el mismo tonito de seriedad, se acercó a ella por la espalda al ver que había volteado y le susurró.

- ¿No es verdad?

Él tenía razon, en gran parte del comentario.

- Y no debes hacer berrinches, creo que ganas más de las personas cuando no esperas nada de ellas.

En ese momento él la abrazó por detras, exactamente de la misma forma en qu ella lo había hecho unos minutos atrás. El elevador se abrió, ya habían llegado.

Entonces tomé las maletas y salí.

- Es por aqui.

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