Paseo nocturno

Me encontraba paseando por la oscura playa mientras veía como la luna se reflejaba en el tranquilo y lóbrego mar. Mis pasos me guiaban por la suave arena rodeando las pequeñas olas que se formaban. Todo estaba muy tranquilo, solo se oía el murmullo de las olas que iban y venían.

-ah… sí que se está tranquilo en este lugar…

Dije en un suspiro mientras me sentaba en la arena mirando como el cielo con sus múltiples estrellas y esa preciosa luna se unía con el oscuro y tenebroso mar. La brisa marina movía mis cabellos mientras observaba la hermosa escena. Me sentía agradecida de poder ver algo tan bonito y romántico, aunque lo viese en estos momentos sola.
Las estrellas brillaban con una luz casi mágica, una estrella fugaz! Cerrando mis ojos y cruzando los dedos de las manos pedí mi deseo, aunque igualmente una pequeña parte de mi sabía que no se cumpliría la mayoría de mi ser deseaba fervientemente que se cumpliera.

*Caminaba por aquel lugar tranquilamente, mientras sentía la brisa de aquella noche, aparte que le serviría para descansar del arduo trabajo que había tenido durante la mañana, mientras iba caminando se notaban las pisadas que iba dejando detrás, al proseguir más y más vio una figura, a la cual acercarse más comenzó a notar que era una joven, lo cual le pareció curioso, así que decidió acercarse hacia ella*

Muy buenas noches señorita, que hace una bella dama exponiendo su hermosura ante la luna y las incontables estrellas?

Cuando abrí los ojos me encontré con que ya no estaba sola, un chico se dirigía hacia mí con aspecto galán.

-buenas noches. Estaba solo mirando el paisaje, por desgracia mi posición solo me deja contemplar paisajes nocturnos.

Le expliqué aun sentada donde me encontraba y mostrándole una sonrisa y volviendo a mirar al cielo. Al poco rato me levanté.

-Encantada soy Frejya

Le dije con una reverencia, tendría que presentarme como era costumbre con algo de respeto hacia la otra persona.

Es todo un placer lady Frejya *Hace una reverencia y entrecierra los ojos unos instantes para después reincorporarse* Mi nombre es Alastor Darklight y como dije es un gusto, disculpe mi curiosidad, pero a que es lo que se dedica usted? Supongo que debe ser actriz *dijo mientras, sentía la brisa del mar pasar por sus cabellos y acariciar suavemente su rostro, después alzo la diestra para quitar algunos cabellos que se encontraban en su frente*

Reí ante la escena que sería ser actriz y volví a sentarme colocándome el cabello.

-que va, las cámaras no pueden gravarme, sería algo así como ropa flotando en mitad de la escena. Soy novelista.

Le dije mostrando una sonrisa. Las olas chocaban contra las rocas y mostraban su singular melodía a las personas que llegasen a oírla. Poca gente se paraba a pensar que cualquier cosa insignificante valía observarla de manera más minuciosa.

-¿y usted? Por su físico también me decantaría porque fuera actor o algo similar

Digamos que en mi tiempo libre, soy actor, pero soy un empresario *comento mientras alzaba la vista al cielo, para observa la luna y las estrellas, a la vez que en ese momento pasaba una estrella fugaz* Mire una estrella fugaz... Pida un deseo lady Frejya *dijo mientras volteaba a ver a la joven esbozando una sonrisa calmada y guardaba en los bolsillos de su gabardina sus manos*

Mantenía la mirada en él mientras me explicaba que era empresario, él miraba al cielo mientras hablaba tranquilamente. Se giró hacia mí cuando vio una estrella fugaz, a lo cual mi vista pasó de él al cielo para verla y pedir el deseo, después lo miré de nuevo.

-no sé por qué hago esto, tengo muy pocas posibilidades de que mis deseo se cumplan.

Reí un poco algo entristecida.

-¿y vos no pedís ningún deseo? O ¿ya los tenéis todos cumplidos?

Le pregunte aun con una sonrisa dibujada en mi rostro.

No necesito de deseos, puesto que yo mismo esforzándome puedo cumplirlos *Dijo mientras agachaba la mirada para ver a la joven Freiya con una sonrisa* Disculpe mi curiosidad lady Freiya, pero cual es ese deseo el cual duda que se cumpla? *A pesar de saber cual podria ser ese deseo que anciaba la joven prefirio indagar un poco, nunca le gustaba quedarse sin saber, si sus sospechas eran correctas o no, luego mientras esperaba respuesta si es que le pensaba responder, tomo asiento al lado de ella, después se recosto y poso ambas manos detrás de su cabeza y su vista se desviaba hacia la joven*

Un brillo en mis ojos apareció cuando me respondió que se esforzaría para hacerlos él mismo realidad.

-Eso está muy bien, creo que así deberían pensar muchos…pero, el mío por mucho que haga no puede cumplirse…

Se sentó a mi lado poniéndose cómodo mientras formulaba una pregunta bastante sugerente, que si yo hubiera creído que las estrellas me lo concederían le hubiera dicho un “no se puede decir, o no se cumpliría”. Me encogí un poco cogiéndome las rodillas con los brazos y mirando al cielo.

-desde que recuerdo siempre he vivido en la oscuridad presente, me gustaría poder salir un día al sol y ver lo que se siente cuando te da en la piel como si fuera una humana…

Alcé una mano para verla a la luz de la luna, viendo mi blanquecina piel.

-si me diera por salir ahora moriría incinerada a la luz del sol, por eso digo que no puede cumplirse mi deseo…

Lo miré con una sonrisa triste y me encogí de hombros.

¿Y si le digo que su deseo puede cumplirse? Claro que solo seria por un lapso de tiempo, de más o menos una o dos semanas *comento mientras cerraba los ojos y esbozaba una sonrisa*

Yo puedo ayudarle con ello *Tenia mucho sin ofrecer tal cosa, eran contados los vampiros a los cuales les había ofrecido tal cosa y por lo mismo tenia siempre problemas con los ángeles, arcángeles y demás seres divinos, pues creían que lo que hacia era blasfemo*

Parpadeé un par de veces sin comprender del todo ¿Quién podría ser Alastor Darklight? ¿Tenía tanto poder como para poder hacer eso?

-¿De verdad?

Mi pregunta formulada sonó demasiado infantil en esos instantes. Ladeé mi cuerpo para apoyarme en mis manos hacia el lado en el que estaba él para mirarlo con curiosidad.

-pero… tendré que darte yo algo a cambio, ¿verdad?

Había escuchado de gente que hacia hecho tratos con demonios… ¿Alastor sería un demonio?, no me importaba mucho la verdad, pero me atraía la idea de salir al sol o ir a este lugar en bañador como el resto de chicas.

Asi es... *comento mientras esbozaba una sonrisa algo malevola* Pero sere amable y mi unico trato contigo sera que hagas una novela con respecto a nosotros dos *comento a la vez que aquella sonrisa desaparecia lentamente aparte seria interesante y divertido volver a desafiar las leyes impuestas por el todo poderoso y mñas el volver a tener que enfrentarse a los ángeles. arcangeles y demas seres divinos, después de todo necesitaba sangre de aquellos seres divinos para algunas cosas extravagantes y para sus propios negocios*

-¿una novela?

Lo miré con curiosidad mientras mi mente unía cabos aunque por su sonrisa anterior aún tenía un escalofrio recorriendome la espalda, pero solo fue un buen susto, bueno, una novela no era un mal trato… Me quedé un rato pensativa mientras cavilaba como podría hacer una novela, nunca me había puesto a mí de protagonista en las mías, así que sería otro nuevo punto de vista.

-muy bien, pero tendrás que hacerme otro favor…

Dije mientras tenía la vista perdida con aun signos de estar pensativa.

-me gusta que mis novelas sean largas, así que si no te importa me gustaría que nos encontrásemos otra vez, o si lo deseas ese encuentro puedes dejarlo a mi imaginación.

Acabe sonriéndole mostrándole una sonrisa alegre, la verdad me gustaba la idea de poder salir a la luz del sol y por su respuesta ya podía adivinar que Alastor era un demonio, aunque no sabía cuan era su poder…

Por mi no ahí problema con volver a verte joven vampiresa, y si te encuentras lista comenzare las preparaciones *dijo para después comenzar a quitarse la gabardina y después doblarla y ponerla en la arena*

Veamos, antes de comenzar recuerda tu último recuerdo feliz antes de convertirte en lo que eres *comento con una leve sonrisa, luego comenzó a dibujar un circulo con el pie en la arena y alrededor de ella, dejándola en el centro del mismo circulo luego comenzó a escribir símbolos arcanos, demoníacos, angelicales, elficos y algunos más extraños que otros*

Le sonreí ante su afirmativa aunque igualmente no sabía que planes podríamos tener la próxima vez.

-ah… vale, mi último recuerdo feliz antes de ser vampiresa…

Me quede pensativa llevándome una de las manos a mi barbilla, ciertamente eran muy pocos los recuerdos que tenía de ese tiempo, casi ninguno para ser exactos, aunque vino a mi memoria uno de cuando mi hermana y yo éramos pequeñas incluso en esa época en la que aun éramos humanas madre nos cuidaba, de noche o dentro de la casa.

-lo tengo… ¿y… ahora?

Me quedé mirándole mientras él dibujaba cosas a mí alrededor. Comenzaba a hacerme preguntas que igual no había hecho antes y que a mi parecer igual eran necesarias.

-¿no será peligroso verdad? ¿Seguiré siendo vampiresa?...

Seras humana, cuando acabe nuestro contrato, volveras a ser vampiresa *comento mientras seguia posando simbolos alrededor de ella, aunque en realidad no eran necesarios, pero como siempre le gustaba hacer pensar a los demas que si, termino de poner aquellos simbolos innecesarios y se puso de pie*

Sigue pensando en aquel dia feliz *comento mientras, comenzaba a hablar en el idioma arcano y a mover los brazos, aunque también esto no era realmente necesario, pero tambien le daba un efecto de misticismo, duro al menos media hora, la cual solo fue para perder el tiempo, aunque aprecia que el demonio lo tomaba muy encerio pero enrealidad soloe ra para engañarle, al finalizar una pequeña luz de energia sobresalio del dedo indice del demonio, luego apunto hacia ella a forma de pistola, y la pequeña chispa de energia salio como una aguja dirigida a su hombro, sabia que después de todo esto ella sentiria un gran dolor el cual solo duraria un par de minutos, pero al menos seria una joven y humana*

-¿hu… humana?
Lo miré con los ojos muy abiertos, ¿era eso posible? Mis ojos seguían a mi acompañante mientras se levantaba después de hacer todos esos símbolos extraños.
-ah! El día feliz…
Cerré los ojos fuertemente pensando en ese día, los abrí un poco para ver como una luz salía de su índice y me llegaba a mí, los cerré más fuerte para seguir pensando en ese día. Cuando la luz me tocó el hombro un calor muy fuerte comenzó a llenarme por completo, al principio no era mucho, pero de repente el calor se intensifico. Abrí los ojos como platos y apreté los dientes, dolía, puse una de mis manos en mi pecho mientras me retorcía en el suelo. Sin más el dolor desapareció, alcé la vista con lágrimas en los ojos por el dolor anterior y parpadeé un par de veces, levantándome avergonzada porque me hubiera visto de esa forma, sentía como mis mejillas tornaban a color rosado.
-ah… ¿soy… humana?
Me miraba las manos y mi cuerpo entero, lo cierto es que no había cambiado mucho, seguía siendo pálida y creía que no había cambiado del todo solo igual los ojos más brillantes y de un color morado tirando a rosado fuerte, y un corazón que hacía siglos que no se movía volviendo a palpitar con ánimo. Sacudí mis ropas y le miré con una amplia sonrisa.
-muchas gracias
Hice una reverencia y luego lo mire con ojitos brillantes.
-¿puedo abrazarte?

Claro que puedes *comento cerrando un poco los ojos al sentir un pequeño mareo, del cual se recupero pronto, se había acostumbrado rápido a ese tipo de cosas, mientras esperaba a que la menor le abrazase, llevo la diestra hacia el bolsillo de su gabardina para luego sacar su cajetilla de cigarros, notando que ya solo le quedaban dos cigarrillos, con la izquierda tomo uno para llevarlo hacia sus labios y mantenerlo alli*

Si llegases a necesitar algo más solo dímelo y haremos algún otro contrato *comento para luego alzar la diestra con el pulgar alzado a la punta del cigarro, luego una pequeña llama purpura aparecer de la punta del pulgar y asi prender su cigarro, mientras guardaba nuevamente la cajetilla*

Sonreí con felicidad y le abracé con energía. En agradecimiento, aunque no me había olvidado de la novela que tenía que escribir, seguramente sería un éxito. Una, pocas veces hace una novela tan… ¿realista? Aunque los humanos igual la veían algo fantasiosa.

-gracias

Alcé la vista para mirarle y ver como encendía el cigarrillo.

-Está bien, y avísame cuando quieres volver a quedar

Le mostré una sonrisa alegre como si de una niña pequeña me tratase, luego me separé de él y lo mire mientras fumaba, el aire olía diferente al ser humana y el humo me molestaba un poco, pero no decía nada. Ahora el aire era más frío y sentía como mi calor corporal disminuía por el viento.

-ah... siento el viento frio que extraño es…

Dije con una sonrisa y cogiéndome los brazos, ahora no me parecía tan buena idea ir de vestido de tirantes.

*Sonrió para luego quitarse la gabardina y ponérsela encima para que se cubriera del frío que estaba haciendo en ese momento* Es mejor que se cubra o atrapara un resfriado y dudo que quiera pasar sus primeros días enferma

*Después de haberle puesto la gabardina, le acomodo un poco el pelo luego volteo a ver la luna y las estrellas admirandolas unos instantes y leugo volteando a ver a Freiya* Desea ir por un chocolate caliente?

Sentí como me ponía su gabardina encima, mis ojos se quedaron mirándole un ratito mientras sonreía, hacia tanto que no enfermaba que apenas sabía lo que significaba esa palabra, cogí con ambas manos la abertura de la gabardina para cerrarla un poco más en torno a mí.

-gracias

Mi sonrisa no se fue de mis labios aunque me quedé un poco sorprendida cuando me acarició el cabello y mis mejillas comenzaron a arderme ligeramente. Bajé la mirada algo avergonzada cuando él se dio la vuelta para mirar al cielo, cogí algo de aire y miré yo también al cielo aunque mi percepción visual había disminuido igualmente se veía hermoso el paisaje, volví a posar mis ojos en él cuando me hizo esa pregunta tan interesante.

-¡claro!, siempre he querido probar comida “de verdad”

Junté mis manos, sonriente aun con las mejillas sonrojadas, tenía muchas ganas de probar un montón de comidas, y solo tenía poco tiempo para probarlo todo.

Entonces permitame invitarle a cenar si no le importa *comento esbozando una sonrisa para luego alzar su brazo a forma de que ella lo tomase*

Y antes me gustaría saber que es lo que quisiera comer, tal vez algo dulce, o algo salado, algo liquido o algo solido *comento con una leve sonrisa en su rostro, a la vez que se preguntaba a si mismo que seria lo que su joven y bella acompañante pediría, a la vez que pensaba miles de comidas de diferentes lugares*

Me puse un poco colorada por su petición pero le sonreí y le cogí del brazo para caminar a su lado, para no pasar frío ante metí mis brazos por las mangas de la gabardina, me quedaba enorme.

-Estaría encantada

Caminado de su brazo me preguntó lo que me gustaría comer, era una buena pregunta, así que me quede unos minutos pensando mientras lo miraba de vez en cuando.

-lo cierto es que me gustaría probar algo dulce y solido, pero en verdad quiero probarlo todo

Sonreí algo infantilmente hacia mí acompañante, sintiendo como mis mejillas volvían a ponerse del color de una manzana madura.

Entonces vallamos a deleitar su paladar mi joven y bella dama *comento con una sonrisa, para luego tomar gentilmente del brazo a la joven y comenzar a caminar de forma tranquila, hacia el restaurant del hotel, pues era un lugar cercano aparte agradable para pasar el rato, aparte de que también sabia que la joven necesitaría descansar*

En el restaurant estoy seguro que encontrara cualquier cosa que guste, por cierto debo decirle que después de esto deberá descansar por casi un dia para que su cuerpo logre adaptarse *comento mientras mantenia aun aquella sonrisa y luego acariciaba suavemente el brazo de la joven*