...Interesante comida...[Julian]

Caminaba hacia el restaurante con él a mi lado, se me abrieron un poco más los ojos, se veía dulce cuando sonreía. Me quedé atontada por un instante y luego asentí cuando dijo que yo misma había notado que él no era humano, cuando me dijo que no estaba en sus planes atacarme y me acarició me puse como un tomate y aguanté la respiración. Su siguiente frase me hizo comprender que pensaba que yo era una humana.

-yo… yo…

Entramos en el restaurante y nos guiaron hasta una mesa.

-yo... lo siento, no soy humana…

Bajé la mirada aun de pie con las manos entrelazadas, estaba apenada por no ser de la “raza” que él pensaba que era. Me quedé de pie por si debía marcharme, no quería que se sintiese mal por mi presencia o algo así…


[off: no te preocupes n.n, espero que te hayan salido bien los examenes :3]

La primer parte del hotel resulto de un decorado sublime, pero el ambiente que se presentaria en el area del restaurant prometia ser mejor.

Pero entonces una respuesta que no esperaba se hizo presente.

-yo... lo siento, no soy humana…

Parecia estar apenada por ello, quiza fue algo que dije.

-Ah!... Disculpa si dije algo malo. Solo que pense que eras humana por ... bueno, por tus reacciones.

Di entonces los primero pasos hacia el esperado lugar, pero note al fin que no parecia moverse del lugar.

-¿Que sucede? ¿Ya no tiene hambre señorita Frejya?

Me acerque a ella y la tome suavemente de la mano.

-Vamos, la noche es joven y los vampiros no solemos ir a dormir temprano. Jeje



[off: al final me fue genial en el examen ^^]

Me puse algo más colorada.

-ah… no, no te disculpes, me suelen confundir… no soy muy parecida a los de mi raza…

Era extraño que una vampiresa pudiera ser de la forma que era yo, simplemente si lo pensaba bien sí que parecía una humana. Alcé la cabeza al oír de nuevo su voz, negué con la cabeza ante su pregunta. Mi sonrojo se acentuó mucho más cuando me cogió de la mano y le sonreí.

-tienes razón n//n

Caminé con él hasta nuestra mesa aun cogida de su mano, mi sonrojo no bajaba su tonalidad aunque en ese momento no me importaba demasiado.
El lugar era muy hermoso y apacible, las mesas decoradas con velas y cada una en su intimidad, hacia el lugar mucho más misterioso y romántico. Pensamientos de novelas ya escritas por mí aparecieron en ese instante en mi cabeza aunque los rechacé algo nerviosa, mis novelas, casi todas eran románticas, extrañas a su modo, pero interesantes igualmente.


[off: me alegro n.n]

Mi mirada se posó en él, tenia parte de razón habíamos venido a “comer” y nosotros no tomábamos nada salvo sangre.

-bueno… siendo este hotel tan famoso para todo el mundo seguro que tienen también algo para los vampiros…

Cogí yo también la carta intentando disimular, sentía sus ojos sobre mí y eso me hacia enrojecer, pude ver en la carta que si había “vino” para nosotros y eso me alivió un poco aunque aún sentía los nervios de ser observada. Baje la carta cuando me pregunto y la pose encima de la mesa.

-si, um… pues me gustan los de fantasía, misterio… jiji creo que me gustan de todo tipo

Pensándolo bien a mí los libros me encantaban cualquier libro que caía en mis manos era leído con interés hasta el final. Mis dedos se entrelazaban jugueteando entre ellos y de vez en cuando con un mechón del cabello

-¿ y los tuyos? n.n

Atendía a todo lo que me decía con una sonrisa en el rostro, aunque se volvió algo seria cuando su mirada cambio a entristecerse. Esperé a que acabase de hablar para refutarle algunas cosas.

-no sé si es porque en mi familia hubo algún ser humano, pero yo siento lo que… crees que no podemos disfrutar, por eso no me molesto que me confundieras con una… sé que mi comportamiento se parece mucho al de un humano, me avergüenzo, me pongo nerviosa incluso temo muchas cosas… por eso no soy igual supongo.

Bajaba la mirada algo nerviosa, tampoco quería mostrar que yo era mucho más como una humana que como una vampiresa.

-personalmente me sorprenden muchas cosas… como el hecho de que me hablases ^^U, no suelen fijarse en mi casi nunca… no te puedo negar que si soy más fuerte y eso que una chica humana de mi complexión.

Vi como apretaba el cuchillo y mis manos cogieron la suya para que lo soltase.

-lo único que tenemos que hacer es proponernos una meta, puede que no sea como la de los humanos, que es la de vivir mucho tiempo, pero nosotros también podemos tener algo por lo que existir en este mundo, un amor, una meta en nuestra carrera…

Cuando me di cuenta de que le estaba cogiendo la mano se la solté colorada y mire la mesa.

-lo…lo siento…

Me cogió de la mano haciendo que mi sonrojo no se fuera de mi rostro, sus palabras eran hermosas y extrañas a la vez, no podía apartar mi mirada de sus ojos. Para mí era la primera vez que encontraba alguien así, la primera vez que me alagaban de ese modo.

-yo… arigato.

Después de su beso en mi mano mi rostro se volvió completamente rojo y le mostré una sonrisa.

-Bu… bueno… tú también puedes hacerlo, no es volverte más débil, pero puede ser todo un reto. Intentar “ser humano” por un día, hacer cosas que a ellos les divierte e intentar divertirte tú también, n.n

Con mis palabras intentaba que esa tristeza se disipara, era todo un caballero, pocos chicos quedaban así. Me quedé mirándolo, era extraño que solo conociéndolo de pocas horas ya quisiera disipar su tristeza, pero así era.
Apareció el metre y nos pregunto con educación que qué íbamos a tomar, me sobresaltó un poco y luego miré a Julian, no me había dado cuenta de que aun seguíamos en el restaurant.

-lo… lo mismo por favor

Estaba un poco nerviosa, este asintió como había hecho antes y cogió nuestras cartas, yéndose tan solemnemente como había aparecido. Giré mi vista hacia mi acompañante, por lo que me había dicho, era escritor, de historias de los humanos.

-parece que te intrigan mucho los humanos…

Me apoyé en la mesa mientras seguía intentando mantener una conversación, me costaba algo, por el simple hecho de no mantener muchas en mi vida, yo era más bien callada. Mi hermana tenía mucha más labia que yo para entablar conversación.

-qué extraño, casi todos los vampiros que he conocido odiaban a los humanos, o creían que solo eran comida, n.n me alegra ver que no soy la única que piensa que no son ni una cosa ni la otra.

Le sonreí ampliamente mientras seguía apoyada en la mesa.

Reí un poco cuando se relamió, me pareció divertido su gesto y que viera que los humanos podían sustentarnos sin matarlos ni nada también me parecía bien.

-me gusta tu forma de verlos, comenzare a ser fan de tus libros

Estaba contenta de encontrar a alguien con quien charlar de cosas normales y divertirme un rato. Atenta a todo lo que decía no pude evitar bajar la mirada de la suya cuando me pregunto mi apellido.

-eto… no tengo… Cuando mi familia murió y solo quedamos mi hermana y yo decidimos enterrar el apellido con nuestros padres…

Tampoco quería parecer triste ni nada parecido así que alcé la cabeza y le sonreí algo nerviosa.

-la suerte es la que manda junto con el destino, supongo n.n

Entrelacé los dedos de ambas manos mientras lo miraba aun con una sonrisa en los labios.

-siento dejarte con la intriga ^^U

-igual sí, debería saber todos tus “motes” para pensar si los leí o no jeje

Le sonreí algo sonrojada mientras veía como su mirada pasaba por las velas parándose en cada una de ellas.

-pues, en vedad no me acuerdo, hace mucho tiempo de aquello..

Mire una vela en concreto fijamente mientras bajaba un poco la mirada. La alcé cuando me preguntó por mi hermana.

-Misa, me dijeron que trabajaba aquí por eso vine a este hotel, hace mucho que no la veo y quería saber si seguía bien n.n

De verdad tenía ganas de verla de nuevo, por el simple hecho de que la echaba de menos.

-jiji somos muy diferentes pero somos hermanas y nos queremos, nos protegemos mutuamente y con eso nos basta.

Puse una sonrisita tímida mientras volvía a mirarle a los ojos con un brillito de ilusión en los mios.

Por suerte ya había terminado mi turno en la cocina, aunque me gustaba trabajar no era cuestion de hacerlo todo el día. Me cambie y sali de la cocina, al salir me encontre con un camarero que me llamo, que extraño... Fui hacia el y me comento que había visto a una muchaha muy parecida a mi, aunque con el pelo más claro y aparentemente más pequeña, esa era la descripción de Fre, mi hermana mayor, aunque por varios aspectos además del físico, parecía ser yo la mayor... No llegaba a creerme que mi hermana estuviera en el hotel, y mucho menos con un chico, pero la curiosidad me pudo por lo que disimuladamente me recorri el restaurante en su busqueda, la vi, ella ella y efectivamente estaba con un chico... Sin pensarmelo dos veces fui hacia ella y la abrace.

-¡Onee-san, te echaba de menos! ¿Que haces aqui?

Mire de reojo al chico y después volvi a mirarla a ella, esraba toda roja, aquel chico la ponía nerviosa... Mire a su acompañante de arriba a abajo con mala cara mientras seguía abrazada a mi hermana. Odiaba que la pusieran nerviosa, y más si era del sexo masculino. ¿Que pretendía? No lo quería tener en la familia, y mucho menos de cuñado.

-La estas poniendo nerviosa, ¿que pretendes? ¿Ligartela? Si es así buscate a otra ¿entendido?

Sonreí aun algo colorada mientras veía al metre servirnos las copas, cuando alzó la suya para proponer un brindis alcé también la mía y me puse mas colorada aún y choqué con cuidado mi copa con la suya, no pasó mucho tiempo (justo el de llevarme la copa a la boca y tomar un poco) cuando oí una voz muy familiar, posé la copa girándome y recibí un abrazo cálido por extraño que pareciera, yo también la abracé

-¡Onee-chan! Yo también te echaba de menos y vine a hospedarme al hotel para verte

Estaba muy contenta, por fin había encontrado a mi hermana, sonreía de felicidad contenida y casi me puse a llorar, tenía unas lagrimitas en los ojos, me separé de ella y al instante se puso a preguntarle cosas a mi acompañante y me hizo ponerme más colorada aún.

-ah… Misa-chan, Julian-kun solo estaba siendo amable conmigo…

Intentaba que se calmara, aunque también me gustaba que me protegiera, no quería que Julian saliera mal parado en esta situación, alzaba las manos negando con estas en el aire para que Misa se calmase.

-a...además... no creo que me vea de ese modo...

Bajé la mirada algo avergonzada hacía el suelo mientras decía aquello

Fre correspondio a mi abrazo, se la veía alegre, aunque era tal felicidad que pude ver como casi lloraba, se veía que sus ojos estaban humedos por las lágrimas, por lo que la abrace con más fuerza. Respondio que ella también me había echado de menos y que vino para verme. era extraño, no recordaba haberle dicho que trabajaba allí... bueno, daba igual, el echo era que estuviera allí conmigo... y con aquel... bicho. Después del pequeño interrogatorio hacia su acompañante, intento calmarme diciendo que solamente era amable con ella, llamandole "Julian-kun"... ¿Así que ese era su nombre...? Estaba en ventaja, yo sabía su nombre pero el no el mio, solamente sabía que me llamaban Misa porque así me había llamado Fre. Ella añadio que no creía que la viera de ese modo, a lo que el bichejo ese pregunto que que si así fuera. Ni me digne a mirarle, no valía la pena, era uno más del monton, por lo que no merecía ni que le mirara. Le ignore totalmente ya que no quería hacer nada delante de mi hermana, ya que podría herirla además de herir también su inocencia. Aunque me conocía de sobras y sabía que era capaz de decapitarlo allí mismo, jamás me había visto en una pelea uy deseaba que eso siguiera siendo así.

-¿Como supiste que trabajaba aqui? ¿Tan rápido va el boca a boca?

Con las manos alzadas aún y alzando la mirada a mi hermana, no pude evitar ponerme como un tomate al escuchar las respuesta de Julian, giré la cabeza para verlo y al ver su sonrisa me puse mucho más colorada, pensaba que toda la sangre de mi cuerpo se me iba a subir a las mejillas. Volví mi vista a Misa que lo había ignorado y ahora me preguntaba como la había sabido que trabajaba ella aquí.

-bueno… tengo bastantes contactos n.n, además, tardé bastante en encontrarte… ¿ te tratan bien aquí verdad?

El ardor de mis mejillas estaba bajando pero aunque bajase más aún por la claridad de mi cabello y el resto de mi piel igualmente se vería muy colorada. Miré de reojo a Julian con curiosidad para saber si solo bromeaba… aunque seguramente no sacaría nada en concreto…
piensa: no creo ser linda ni nada para gustarle... ¿qué pensará de mi? Me preguntaba mientras seguía mirando a ambos sonriendo, aunque aún colorada

Vi como Julian se levantaba y se ponía a mi lado caballeroso como cuando hacia un tiempo le había conocido, me beso la mano, haciendo que mis mejillas se volvieran a poner coloradas. Se despidió alegando que podíamos quedar otro día y yo podría hablar con mi hermana.

-ah! Julian-kun… por favor espera..

Había dado unos pasos hacia él sin darme cuenta, esperando a que se quedase, me estaba gustando tener a alguien con quien hablar, mi hermana estaba de nuevo conmigo pero tampoco quería que Julian se fuera…

-onee-chan perdóname por hoy, me gustaría estar un poco más en compañía de Julian-kun un poco más, ¿quedamos mañana aquí? Tengo mucho que hablar contigo..

La abracé de nuevo con cariño y le susurré.

-permíteme ir con él, hace mucho que no hablo con nadie de manera similar. Te quiero Onee-chan.

Le di un beso en la mejilla y me separé de ella para ir con Julian, me daba mal dejarla así, yo había venido a por ella, pero… me gustaría seguir con mi acompañante un rato más. Llegé a Julian y lo mire.

-si no te molesta me gustaría estar un poco más en tu compañía n_n

-bu… bueno, así era pero me gustaría igualmente disfrutar un poco más de tu compañía n_n

Al ver como él me ofrecía su brazo lo tome sonriendo y me giré para despedirme de mi hermana con la mano.

-Hasta mañana hermana, me alegro de volver a verte de nuevo.

Caminé al lado de Julian saliendo del restaurante. Sus preguntas no tardaron en llegar para ver a qué lugar nos dirigiríamos en estos instantes para seguir con nuestra charla amistosa. La verdad es que me importaba más bien poco donde nos dirigiéramos con solo estar en su compañía me bastaba.

-como tú desees n_n, en cualquier parte se está bien para hablar…

Lo mire a los ojos sonriente y añadí.

-aunque ir por los jardines seguro que sería muy romántico

Reí un poco ante mi frase aunque tampoco pude evitar ponerme un poco colorada por ella también.