Despues de adquirir los servicios de Mio-chan llegamos a la suit, le abri la puerta como todo un caballero, no paraba de sonreirle a mas no poder- Bienvenida- le invite a pasar, entre enseguida, la habitacion era enorme con una cama bastante grande, eso em hacia sentir algo solo, cvamine hasta mi escritorio y me sente en mi silla favorita, podia pasar todo el dia en ella sin sentir incomodidad, mire un momento el gran ventanal que daba al balcon- Te agrada?- le pregunte con interes, si no estaba comoda en seguida pediria cambio de habitacion.