Corria por las afueras del hotel, dejando que la suave brisa me despeinara, acercandome cada vez más al lago. Era divertido, tanto la idea de correr de esa forma, como de descanzar allí, era un lugar pacífico, aparentemente.
Me encontraba "paseando" entre las nubes y mi mente, aún siguiendo mi trote, cuando distraida olvidé que había algo llamado suelo, y en el suelo podia haber ramas... Por lo que tropecé con una y comencé a rodar.
- Nyaaaaaauuuuuuu~ - chillé mientras a gran velocidad iba acercandome más y más al lago, dispuesta a caer. En sí era diveritdo rodar, pero ya estaba comenzando a clavarme todo tipo de objetos que podian estar en el piso, y eso era algo... ¿Incómodo?