Sola en el lago...

Invitado

La joven de ojos celestes se mantenía con la mirada perdida en el agua calma del lago, se encontraba en completa en silencio y quieta. Sus rosados cabellos se mecían a veces suavemente con el fresco aire, provocando ciertos escalofrios en su cuerpo.

- Que agradable noche -. Musitó mientras tomaba asiento cerca del agua, en si ya era bastante tarde, pero bajo su opinión los paisajes en la noche eran todavía mas hermosas que en la mañana, pero esa era solo su opinión. Cerró sus orbes celestes mientras seguía disfrutando de aquel agradable ambiente, ignorando por completo los proximos sucesos que pasarían en las proximas horas.

Invitado

-Comprensible era buscar algo con el cual poder entretenerse un poco, más si la noxe llamaba sutilmente a ello. Su cuerpo siempre excedía de calor corporal, entonces un lugar fresco era lo mas deseable en el momento. Buscando sin muxa determinación, encontró un solitario lago, lo suficientemente llamativo como para dejarse llevar por el instinto y dejarse refrescar. No así era motivo para perder el sentido de humor, por ello, antes de sentir lo frío del agua, demostró su destreza para mantenerse en equilibrio, y aun más sorprendente, permanecer en la superficie del agua. Algo caracteristico de el es su falta de palabra, muxo más de alguna expresión emocional. Simplemente permanecia allí, sin esperar nada.-

Invitado

Se puso de pie con calma, estirandose en su lugar, había sentido a alguien cercas... muy cercas y no pensaba quedar con la duda de quien se trataba. Se acomodo un poco la falda que se había subido al haberse sentado y sin mas comenzó a caminar por la orilla de la laguna en busca del dueño de aquella esencía. Freno en seco al identificarlo... no lo conocía pero nadie podía confundir a un demonio... ¿o vampiro? había cierta confusión, tenía dos esencías a la vez y no sabía cual de las dos era. Sonrió levemente, su naturaleza angelical le prohibía juzgar de un ser maligno sin siquiera saber de lo que era capaz y con bastante tranquilidad se dejo mostrar.

- Hola -. Musitó con su mismo tono tierno, manteniendo la cierta distancía con aquel desconocido, pues no estaba de más el cuidarse.

Invitado

-Se limitó a girar el cuello, observandola sin dejar en exposicion su mirada. Esperó unos momentos antes de actuar, siempre era considerado en su accionar, premeditando todo lo posible próximo a acontecer fuera por su parte o no. No hubo duda que no notara el movimiento de aquella mujer, contraria a él, siendo más atento a lo que hizo con su falda, pues eso demostraba que ella era recatada. Regresó naturalmente el cuello a su posición original, y de un salto llegó a las orillas del lago. Dispuso de sus manos en los bolsillos, no creía que llegaran a ser utiles por el momento. MAntuvo el silencio, expectante de aqella forma angelical.-

Invitado

Se quedo en silencio durante todo el momento, pues en si no era buena para comenzar a hablar con desconocidos. Sonrió levemente mientras entrelazaba sus manos por delante de ella, aunque inconscientemente se mantenía atenta, pues no sabía quien era este ni mucho menos lo que sería capaz de hacerle.

- Este... -. Sonrió ahora nerviosa al no saber que decir, así que se limitó a avanzar otro paso mientras mantenía la sonrisa. - Soy Charlotte ¿Con quien tengo el gusto? -.

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Ten la certeza que pronto lo sabrás...

-.Dirigió su cuerpo a ella, con la finta de un paso posiblemente a dar, pero no.. se mantuvo quieto, algo no le era común. Tomó sus recuerdos más frescos y en ellos no daba con aquella situación que vivía: que alguien le saludase, mucho menos, alguien contrario a su naturaleza. No dedicó tiempo en pensarlo, no era necesario, puesto que las cosas ya se daban por sí solas, sería insensato querer influir en algo que fluía por sí mismo. Sin más que decir, movío su mano derecha para ponerla en su cuello, sentir lo tenso de sus musculos, respirando marcadamente. Empezó a actuar como si ella no estuviese ahí...

Invitado

- p-pero... -.

Le miró de manera tranquila, sin comprender bien el porque no le había respondido, pero tenía la ilusa creencia de que este le diría su nombre de una manera... normal. Cuando notó sus proximas acciones le miró de manera tanto curiosa como confundida, pues en cierto modo se sentía quizas algo... ignorada.

- ¿Estas bien? -.

Murmuro suavemente con su tipico tono angelical, se mantuvo en su lugar con la mirada puesta a este, como si creyera que con tan solo mirarlo podría saber su nombre.

Invitado

-. Simulando como si la viese directamente a los ojos, meneó la cabeza ligeramente para desmentir aquella pregunta, pero como siempre su mirada era inequivocamente ocultada por su pelo. El titubeo en su voz pretenciosamente le hacia confundir y tener ideas multiples y diversas, no obstante era mejor callar y observar. Para demostrar el bienestar, empezó a estirarse, como si recien saliese de un gran sueño o estuviese cansado pero todo normal. Como bien tomo tiempo todo eso, aora dedicaba mas atencion en ella.-

claro.. tu lo estas?

Eso si, su voz era leve, casi inaudible, pero legible a un buen oido.

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llego al lago y me siento a su orilla

que tranquilo